Pero ¿qué es la economía circular?

Aunque responder a esta pregunta daría para un artículo en sí mismo, se podría resumir del siguiente modo: implementar un modelo circular en las empresas supone un replantear su sistema de producción y consumo, de manera que se pasa a priorizar la reutilización de los recursos y la reducción de los residuos Para lograr la correcta implementación del modelo circular es clave la colaboración y trabajar con todos los agentes de la cadena, des de aguas arriba como aguas abajo. Y tener una visión de ciclo de vida de los productos que uno ofrece.

Obviamente, esto no se puede llevar a cabo de la noche a la mañana, pues supone un cambio de paradigma desde el modelo lineal, más enfocado en extraer, usar y tirar. Por ello, la integración de los cambios es responsabilidad de la propia empresa, que ha de poner los mimbres para construir sobre ellos una estructura basada en un modelo circular. Eso sí, hay que tener en cuenta que se trata de una estrategia que se aleja del cortoplacismo en el que se mueven muchos negocios, o lo que es lo mismo, evolucionar a una economía circular ha de planificarse a medio y largo plazo.

Economía lineal vs. economía circular

Pero para comprender mejor cómo va a ser este cambio de paradigma empresarial, lo mejor es comparar ambos modelos, de manera que se tengan muy claros los riesgos y oportunidades de uno y otro:

• Costes y beneficios: de acuerdo con los cálculos de los expertos, la aplicación de un modelo de economía circular supondría un incremento del 8% en el volumen de negocio, así como un ahorro global de más de 500.000 millones de euros.
• Crecimiento: esas cifras llevarían a un indudable crecimiento empresarial, lo que a su vez conducirá a una mejora de la competitividad.
• Reducción de riesgos: Un modelo circular protege a las empresas de la volatilidad de precios de las materias primas, al mismo tiempo que reduce los riesgos asociados por incumplimiento de las nuevas regulaciones vinculadas al Cambio Climático y desarrollo sostenible.

Pasos para integrar la economía circular en las empresas

Al igual que en los puntos anteriores, explicar cada uno de los pasos para este cambio lleva mucho tiempo y depende en buena medida del tipo de empresa, con lo que solo comentaremos los puntos más habituales:

• Identificar riesgos. En primer lugar, es importante conocer los riesgos que supone para la empresa continuar con el modelo actual (mayores costes por el aumento de los precios de las materias primas, incumplimiento con las nuevas regulaciones europeas y nacionales, no satisfacer las nuevas demandas de los consumidores, etc.) y las oportunidades que pueden darse con la aplicación de la economía circular (mayor competitividad, disminución de costes, aumentar la cuota de mercado, etc).
• Planificación. Una vez que se tiene clara la aplicación del nuevo modelo, se debe preparar una estrategia y una detallada planificación del cambio. Para ello, es recomendable contar con la ayuda de expertos en el área, que permitan identificar los puntos débiles y fuertes del modelo, y donde es mejor invertir recursos a fin de poder llevar a cabo la transformación necesaria. De forma general, se tendrá que identificar todos los agentes implicados de forma directa o indirecta en la cadena de suministro, los procesos de producción y analizar al detalle el contexto en el que se encuentra la empresa. No obstante, el plan puede ir delimitado por pequeñas acciones, así como por una continua apuesta por la innovación y por la utilización de servicios más sostenibles.
• Comunicación. Comunicar en todo momento, tanto a nivel interno como externo, la voluntad y el plan de cambio hacia un modelo de negocio basado en la sostenibilidad y la economía circular es clave Sin una buena estrategia de comunicación cualquier cambio puede ser percibido como una marcha atrás de la empresa en lugar de un beneficio para todos.
• Análisis. Como cualquier cambio empresarial, cada acción debe ser analizada con un adecuado seguimiento. Ante todo, la economía circular no debe verse solo como un cambio en la imagen de la empresa, sino en como la herramienta para mejorar la competitividad e incrementar los beneficios en el futuro, a la vez que se pone un granito de arena en el cuidado medioambiental.

Modelos de aplicación de economía circular en las empresas

Para finalizar esta introducción a cómo integrar un modelo de economía circular en la empresa es necesario enumerar algunos modos de aplicación:

• Retorno de recursos. En este caso, el producto no muere al final de su ciclo de vida, sino que se transforma mediante el reciclado o la reutilización. Por ejemplo, empresas que generan un gran volumen de residuos pueden transformarlos y recuperarlos.
• Alargar la vida útil del producto. La remanufacturación y el ecodiseño permiten que un producto tenga múltiples vidas sirviendo la misma utilidad o una diferente. Estas estrategias permiten reducir el número de residuos generados (y los costes asociados a su gestión) y reducir la necesidad de consumo de materias primas.
• Espacios, recursos o plataformas compartidos. Establecer sinergias interesantes entre empresas de un mismo sector, o misma localización es clave para compartir recursos, conocimientos, tecnología, buscar alternativas a los residuos de unos y necesidades de otra, etc.
• Servitización en lugar de venta. Repensar el modelo de negocio, dejando de producir para vender, y pasar a producir para ofrecer su uso.
• Suministros circulares. A nivel tanto de producción como de consumo, se establece el uso de suministros renovables, reciclables o biodegradables en sustitución de aquellos con gran impacto medioambiental.