Hay que considerar que presentar a través de una pantalla reduce nuestro impacto y la energía que transmitimos, ya que esa pantalla es lo único que van a ver de nosotros. Además, en cámara se magnifica la expresión corporal y en entornos como el despacho de casa puede haber ruidos inesperados, cortes de conexión, etc. 

Nada de eso ayuda en la persuasión, pero si sigues estas reglas mejorarás tus resultados.

Consejos para el mejorar el impacto en presentaciones online

1. Ten la mentalidad adecuada 

Imagínate que fueras a ser entrevistado por televisión. Es una situación análoga. En televisión necesitas enfatizar tus expresiones faciales y mantener un tono de voz más alto y animado. También es importante controlar tu lenguaje corporal porque puede distraer a tu audiencia, por ejemplo, si te mueves mucho puedes transmitir nerviosismo. Cuando no hables, trata de estar quieto (nada de ser visto tomando un sorbo de café) y proyecta que estás escuchando atentamente.

2. Prepara la iluminación 

La fuente de luz ha de estar delante de ti. Evita que la iluminación venga de detrás. No tengas una ventana detrás de ti porque restará iluminación a tu rostro, colócate frente a ella en su lugar. Prepara la iluminación con antelación y haz pruebas (y pide feedback a alguien) antes de la presentación. Controla cuidadosamente lo que se va a ver a tu espalda o utiliza la función “desenfocar fondo” de la aplicación que utilices para no distraer a tu interlocutor. 

3. Eleva tu portátil

El ángulo más favorecedor para la cara suele ser aquel en el que los ojos están al mismo nivel que la cámara. Coge algunos libros y ponlos debajo de tu portátil para elevar la cámara. Verte bien en cámara aumentará tu seguridad en ti mismo y a tu interlocutor se le hará más agradable seguirte.

4. Anticípate

Algunos problemas tienen remedio pero empezar una presentación con mal pie no lo tiene. Intenta conectarte un poco antes de la hora marcada para probar que todo funciona y deja abiertos todos los archivos y programas que pretendas mostrar en pantalla.

Asegúrate también de que nadie vaya a entrar en la sala desde la que presentas. Silencia tus teléfonos y desactiva cualquier dispositivo que pueda emitir sonidos de alarmas y notificaciones. Planea tu atuendo con tiempo también y evita joyas o accesorios llamativos que puedan distraer o hacer ruido al moverse mientras estés hablando. 

5. Limita el número de diapositivas

Las personas pueden leer lo que hay en una diapositiva mucho más más rápido que lo que tú tardas en pronunciarla en voz alta. Presentar diapositivas durante tiempo prolongado hará que vayas perdiendo a tu audiencia a medida que se pierda el contacto cara a cara. Por tanto, mantén cortos los periodos de presentación de diapositivas y vuelve a tu cara. Además, las personas no pueden leer una diapositiva y a la vez escuchar lo que estás diciendo. Por eso, tus diapositivas deben ser muy visuales y minimalistas y servirte exclusivamente como apoyo para lanzar tus mensajes. 

6. La práctica lleva a la perfección – ensaya

Siendo honestos, hacer una presentación puede resultar raro. Por eso, ensayar una defensa virtual te ayudará a que te sientas más cómodo y controles mejor la situación. Ensaya con una audiencia de prueba (por ejemplo, un compañero) para asegurar que transmites una buena imagen. Graba tus ensayos y observarte después para confirmar que el impacto que provocas es el que buscabas. Si no lo es, haz ajustes.

En definitiva, No te limites a pensar en lo que harías cara a cara y trates de hacer exactamente lo mismo online. Presentar virtualmente en lugar de en persona marcará una gran diferencia, pero si sigues estas seis primeras reglas tendrás muchas más posibilidades de causar el impacto que buscas en tu presentación comercial.